Los centros educativos están combinando la lección magistral de toda la vida con innovación en métodos de aprendizaje así como la implementación de propuestas arquitectónicas y tecnológicas, todo ello con el fin de crear una mejor experiencia académica.

  • ¿Se han acabado las clases magistrales?
  • ¿Se están adaptando las universidades a las nuevas tendencias de innovación?

Los cambios tecnológicos, la revolución digital, la mejora en los procesos educativos y la implementación de nuevas metodologías de innovación están haciendo mella en el mundo universitario.

La vida en el aula nos da a entender que las metodologías de enseñanza están cambiando a los centros académicos por ejemplo, la inclusión de paneles educativos, mesas redondas, tutorías, la inclusión de nuevas tecnologías, el aprendizaje en línea, etc, están modificando nuestra forma de pensar de como debe de ser las clases en los centros educativos y por ende  la motivación del alumno y del profesorado.

«El aula invertida» («flipped classroom»)

La visión que teníamos de las clases magistrales y de que al final una asignatura se decida todo por un examen, ya está pasando a la historia. Las nuevas metodologías conllevan nuevas formas de aprender y metodologías de evaluar al alumno, por ejemplo experiencias que tímidamente están empezando a implantarse en algunas universidades como es el aula invertida (flipped classroom) da un giro radical al concepto en la clase tradicional, el alumno recibe contenido, lo analiza en casa y va clase a debatir, a discutir y a resolver dudas y preguntas y lo que es más importante a resolver cómo hacer proyectos y cómo utilizar el conocimiento.

Hay una constante, la puesta en marcha por muchas universidades de experiencias, todas ellas conducentes a que la motivación del alumno y del docente sea la más alta posible.  Stanford por ejemplo habla de aulas abiertas donde en cualquier momento el alumno entra y sale, tal vez en nuestra cultura puede llegar a ser difícil manejar estas situaciones. No obstante conceptos como la evaluación continua donde un estudiante no se juegue todo un curso en un solo momento, parece que es un método interesante analizar, cómo la clase se puede convertir en un foro de discusión en verte un monólogo,  como las propias arquitecturas de las clases pueden influir a la hora de crear un clima mucho más propicio por ejemplo eliminación de paredes, etc.

La Universidad Camilo José Cela ha diseñado espacios que motiven al estudiante donde la tecnología sea de vanguardia e innovadora y que cuenten con metodologías activas de aprendizaje. Cuenta todos los detalles, los niveles de luz, ruido y temperatura, por ejemplo se ha demostrado que el rendimiento en materias donde exige una mayor concentración, como pueden ser las matemáticas y la música si las condiciones medioambientales son óptimas, el grado de concentración, motivación y de actitud es más altas que la media.